Murió Jorge Glusberg, ex director del Museo de Bellas Artes

Pablo E. Chacón y Leticia Pogoriles

El ensayista, editor, antólogo, arquitecto, promotor cultural y ex director del Museo Nacional de Bellas Artes (MNBA), Jorge Glusberg, falleció este jueves, por causas no reveladas aún, a los 79 años.

Fundador de la Bienal de Arquitectura de esta capital y director del Centro de Arte y Comunicación (CAYC), consultor de la revista Latin American Arts de los Estados Unidos, e íntimo amigo del arquitecto César Pelli, la noticia de su muerte fue confirmada por su familia a Télam, ratificando que sus restos no serán velados.

Glusberg había nacido el 23 de septiembre de 1932; en su extenso derrotero, fue co-director del Departamento de Arte de la Universidad de Nueva York y presidió la sección argentina de la Asociación Internacional de Críticos de Arte.

Gestor e interlocutor de artistas, intelectuales y diversos coleccionistas, también fue miembro del comité editorial de la revista D`Ars, de Italia, corresponsal de las revistas M. E., de Hungría, y Leonardo, de Estados Unidos. Supo tener una columna semanal en el periódico Ambito Financiero.

Desde allí promovió una zona importante del arte de los 90, enfrentándose a los sectores más conservadores del MNBA, representados por los Amigos del Museo. Pero eso fue mucho después; en su cruzada de apertura, contaba con el respaldo del ex canciller Guido Di Tella.

Durante la última dictadura cívico-militar, Glusberg, desde el CAYC, intentó reconstruir el espacio que supo ocupar el Instituto Di Tella, y así, durante la oscuridad de esos años, pudieron verse algunas cosas que de otra manera hubiera sido imposible.

Publicó libros sobre arquitectura, diseño, arte moderno. Sus títulos, "Mitos y magias del fuego, el oro y el arte", "Art in Argentine", "Del pop-art a la Nueva Imagen", "Orígenes de la Modernidad", "Moderno-Postmoderno" y "Obras Maestras del Museo Nacional de Bellas Artes", entre otros.

Para Liliana Piñeiro, arquitecta y actual directora de la Casa Nacional del Bicentenario, la muerte de Glusberg le produjo "mucha pena".

En diálogo con Télam, agregó que lo conoció "por el CAYC. El marcó un antes y un después para los arquitectos a través de esa institución y de la Bienal de Arquitectura. Hizo un trabajo muy rico para que nos conozcan afuera y para que conociéramos el panorama internacional".

Y respecto a su gestión en el MNBA, Piñeiro sostuvo "en el mundo del arte, a uno le pueden cuestionar muchas cosas, pero él (por Glusberg) hizo un valioso aporte a la escena del arte" Y eso, "tanto desde el CAYC como con sus publicaciones, aunque tuvo una partida no muy grata del Bellas Artes".

La funcionaria insistió que los arquitectos, "antes, teníamos pocas posibilidades, no había internet y sin embargo, pudimos conocer el arte de afuera y promover el nuestro".

En 1986, reconocida su tarea de difusión, recibió el diploma al Mérito y fue galardonado con la Medalla de Oro en el 30 Aniversario de las Naciones Unidas (ONU).

Jurado de la Fundación Konex en 1992, 1994 y 2002, se desempeñó como profesor de número en las universidades de Nueva York (como se dijo), Ball State, San Antonio Abad del Cuzco (Perú) y Veracruz (México).

Estuvo al frente del MNBA hasta el 2003; renunció a causa de una serie de acusaciones y querellas con funcionarios, burócratas y artistas que lo acusaron de favorecer a sus amigos, situación que jamás pudo probarse.

Fuente: telam